Los representantes vecinales solicitaron la inclusión de un punto en el Orden del día del pleno municipal de ayer, para exponer sus argumentos
Las asociaciones de vecinos de Es Figueral-Can Farineta, Sant Marçal, Sa Cabaneta y Ses Cases Noves, junto con la plataforma vecinal de Sa Vinya de Son Verí, rechazan la construcción de ambas infraestructuras, ya que consideran que afectarían muy negativamente a la calidad de vida de sus habitantes. Estas cuatro asociaciones y la plataforma representan a unos 6.000 vecinos y esperan seguir sumando adhesiones en los próximos días.
El nuevo establecimiento comercial que se quiere construir es un supermercado de una conocida cadena con una superficie construida de 5.000 m2 y con un aforo de hasta 816 personas; se ubicaría en el núcleo urbano de Es Figueral, en el que viven poco más de 500 familias. La cadena reconoce, en su proyecto, de actividades que podría llegar a facturar hasta 2.787 tickets de compra en un solo día.
Los vecinos afectados no necesitan ni quieren este supermercado, ya que la misma cadena tiene otro funcionando desde hace veinte años a tan solo 1 Km de distancia y a menos de 2 minutos en coche. Y además, tienen a su disposición hasta siete supermercados, a su alrededor, en un radio de tan solo 4 Km.
Los vecinos están preocupados por el gran incremento de tráfico que podría suponer la construcción de dicho establecimiento, que podría llegar hasta un 50%, o más, en días señalados y horas de máxima afluencia, sobre una carretera, la Ma-13a, de tan solo un carril por sentido y con arcenes mínimos o sin ellos en algunos tramos y por las calles del interior de Es Figueral, lo que podría ocasionar una saturación de tráfico, con constantes retenciones, ruido y contaminación del aire. Todo ello, además, sumado a que según el proyecto, dicho supermercado solo contaría con 105 plazas de aparcamiento, claramente insuficientes y cuyo exceso no puede ser absorbido por las calles que lo rodean.
Respecto de la obra de la rotonda, cuyo promotor es la propia cadena de supermercados, estas se iniciaron el pasado 15 de febrero, sin que el proyecto se hubiera sometido a exposición pública, con el agravante de que hacían desaparecer totalmente un tramo de un vial peatonal del núcleo de población de Sa Vinya de Son Verí; pero la presión vecinal consiguió paralizarlas y así continúan a día de hoy. Los vecinos han presentado 150 alegaciones en contra de esta obra, ya que entienden que no es necesaria, que les altera la estructura de sus calles y que su única función sería en provecho del nuevo supermercado.
En estos momentos, y hasta el próximo viernes, se encuentra en exposición pública el proyecto del nuevo supermercado y las entidades que lideran la oposición vecinal están recogiendo alegaciones también en contra de su construcción. Además han contratado un despacho de abogados de Palma para que les lleve el asesoramiento y representación legal en relación con este proceso.
