La Policía Local de Palma ha detenido a un dominicano que se mostró agresivo y amenazante.
Todo ocurrió pasadas las tres de la madrugada. La calle Torcuato Luca de Tena se convirtió en escenario de un estallido violento y surrealista. Un hombre, dominicano de 47 años, terminó detenido por la Policía Local tras irrumpir armado con un cuchillo de cocina y botellas rotas para amenazar a los clientes de un bar. Lo que comenzó como un altercado menor acabó transformándose en un episodio que nadie dentro del local olvidará.
De la expulsión al ataque: la vuelta del agresor
A las 03:15 horas, el individuo había sido invitado a abandonar el establecimiento por su actitud agresiva. Según los testigos, lejos de calmarse, decidió regresar con un mensaje contundente. Blandeando un cuchillo de 20 centímetros de hoja, irrumpió de nuevo en el bar. Como si eso no fuera suficiente, rompió dos botellas de cristal y se armó con los afilados cuellos rotos, usándolos de forma amenazante contra quienes apenas minutos antes compartían la madrugada sin sospechar lo que venía.
El miedo se extendió. Cristales rotos, un arma blanca en mano y varias personas atrapadas en un ambiente donde la tensión podía desencadenar una tragedia en cuestión de segundos.
La reacción inesperada: un cliente desarma al agresor
Cuando la amenaza parecía inminente, uno de los clientes tomó una decisión arriesgada que cambió el curso de los hechos. Se abalanzó para quitarle las botellas rotas. En el forcejeo, sufrió un corte leve en la mano. Fue un gesto temerario, casi instintivo, que evitó un daño mayor. No hubo gritos de héroe, pero sin duda su intervención dejó una huella en la madrugada.
Intervención inmediata: la Policía logra cerrarle el paso
La policía llegó rápidamente. Agentes de la Unidad Nocturna (UNOC) localizaron al individuo en los alrededores y lo detuvieron. Había escondido el cuchillo bajo un vehículo estacionado, como quien intenta borrar el rastro de su brutal regreso. Pero el arma fue hallada poco después por los agentes.
El hombre, con antecedentes policiales, fue trasladado a dependencias municipales. Tras las diligencias de la Sala de Atestados, quedó a disposición de la Policía Nacional.











