También se ha mejorado la calle Joan Mir, Ermità con un coste total de más de 110.000 euros.
El Ayuntamiento de Alaró ha concluido recientemente las obras de reordenación, mejora de la accesibilidad y embellecimiento de la plaza del Rosari y del primer tramo de la calle Joan Mir, Ermità. Este proyecto se ha llevado a cabo con el objetivo de dignificar un espacio emblemático del núcleo urbano y adaptarlo a las necesidades actuales de movilidad y convivencia ciudadana.
Además, se ha querido ordenar este punto del municipio, ya que se trata de una de las zonas con más tránsito del centro, donde confluyen diversos servicios como el Centro de Salud o un supermercado, entre otros.
La intervención ha sido posible gracias a la financiación del fondo de desarrollo turístico del Govern de les Illes Balears, con una inversión global que ha superado los 110.000 euros. Los trabajos ejecutados se han estructurado en dos proyectos diferenciados pero complementarios, que han supuesto una transformación significativa del espacio público.
Por un lado, se han creado ocho nuevas plazas de aparcamiento, seis para vehículos y dos para motocicletas, con el objetivo de responder a la creciente demanda de estacionamiento en la zona. Además, se han habilitado cinco plazas de aparcamiento rotativo (zona azul) con una duración máxima de 30 minutos, operativas de 9 h a 20 h, para favorecer la rotación y facilitar el acceso a los comercios y servicios cercanos. Los usuarios deberán indicar la hora de inicio del estacionamiento. Estas plazas se han ganado gracias a un cambio en la regulación del tráfico, que ha pasado a tener un único sentido en la calle.
Otra actuación destacada ha sido la renovación del alumbrado público de la plaza, con la instalación de luminarias más eficientes y sostenibles. También se han reformado las aceras, tanto en la plaza como en el tramo afectado de la calle Joan Mir, para adaptarlas a la normativa vigente en materia de accesibilidad, garantizando así una movilidad más segura e inclusiva para toda la ciudadanía.
Finalmente, se ha llevado a cabo una mejora estética global de la plaza, con la unificación del empedrado y una actuación paisajística que integra el espacio dentro del entorno urbano con una nueva armonía visual.
El alcalde de Alaró, Llorenç Perelló, ha valorado muy positivamente estas obras, destacando su importancia estratégica y su impacto en la vida cotidiana del municipio: «Esta obra responde a una voluntad clara de hacer de Alaró un pueblo más accesible, cuidado y pensado para las personas. Es una mejora funcional y también estética, que refuerza nuestro compromiso con una movilidad sostenible y una mejor calidad de vida para los vecinos y vecinas de Alaró. Además, nos enorgullece poder llevarla a cabo gracias a la captación de fondos europeos, que permiten financiar proyectos transformadores como este».
Con esta intervención, el Ayuntamiento reafirma su apuesta por una gestión responsable y eficiente de los recursos públicos, al tiempo que continúa trabajando para modernizar los espacios urbanos, manteniendo el carácter y la identidad del municipio. La plaza del Rosari y la calle Joan Mir, Ermità, recuperan así su protagonismo como lugares de encuentro, de paso y de vida comunitaria.
