El Ayuntamiento instala tres nuevos DEA en los colegios del municipio en su apuesta por un entorno más seguro y cardioprotegido.
El Ayuntamiento de Alaró ha dado un nuevo paso en su compromiso con la salud y la prevención de emergencias cardíacas. Lo ha hecho con la adquisición de tres desfibriladores automáticos externos (DEA) que ya se encuentran operativos en los principales centros educativos del municipio.
La iniciativa, con una inversión total de 3.600 euros asumida íntegramente por el consistorio, se ha materializado con la instalación de dos dispositivos en el CEIP Pere Rosselló i Oliver —cubriendo sus dos edificios: infantil y primaria— y un tercero en el colegio Nuestra Señora de la Consolación.
El acto simbólico de entrega estuvo presidido por el alcalde de Alaró, Llorenç Perelló, y la concejala de Educación, Maria Antònia Martorell, quienes hicieron entrega de los equipos a los directores de ambos centros: Jordi Escudero y Jordi Seguí, respectivamente. Un gesto que refuerza la voluntad institucional de proteger a la comunidad escolar y garantizar su bienestar.
Esta acción forma parte del plan municipal de cardioprotección que impulsa el Ayuntamiento. Alaró ya dispone de desfibriladores en puntos clave como el campo municipal de deportes, la plaza de la Vila y la sede de la Policía Local. Ahora, con la ampliación de esta red a los entornos escolares, el municipio da un paso más hacia la prevención activa y la respuesta inmediata ante situaciones de riesgo vital.
El objetivo es claro: convertir Alaró en un espacio más seguro, saludable y preparado para actuar con rapidez ante emergencias cardíacas. La instalación de DEA en lugares de alta afluencia es una medida eficaz, avalada por profesionales sanitarios, que puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte en los primeros minutos tras un paro cardíaco.











