Les acusa de hacer un «paripé» y de mantener el requisito del catalán en el función pública.
El diputado no adscrito en el Parlament, Agustín Buades, denuncia la perdida de tiempo que ha llevado «este paripé de la aprobación de los mismos presupuestos que ya se presentaron en noviembre».
Sentencia que «Vox una vez más engaña a sus propios votantes manteniendo el requisito de catalán en la función publica y las medidas que se han señalado no cambian para nada la inmersión lingüística que estamos padeciendo».
Expone que «el plan de libre elección de lengua es el mismo que ya aprobamos en los presupuestos del 2024 y por lo tanto no hay ninguna novedad en la hoja de ruta que se pactó entonces».
Buades entiende que «si la reforma de la ley de educación es el conocimiento vehicular de las dos leguas oficiales, no aportará nada en la práctica. Una intención que no conllevará ningún cambio práctico para las familias a la hora de la libre elección de lengua».
En el tema de inmigración, recuerda que «además de intenciones y buenas palabras, ni el Govern ni los Consells tienen competencia para repatriar a menores no acompañados. Promesas vacías».
Recalca que no hay «ni una palabra sobre políticas sociales sobre dependencia, discapacidad y sobre todo de políticas con perspectiva de familias, a la promesa de una modificación de ley de familias y apoyo a la maternidad».
El único punto positivo que ve es el anuncio de la derogación de la ley de memoria democrática, pero recuerda que «aún sigue vigente por culpa de Vox ya que utilizó un fallo en la votación de unas enmiendas para rédito partidista».