La Policía Nacional lo ha detenido por un delito de estafa ya que no pagaba lo adquirido y lo dejaba a deber a su antigua corporación.
Durante semanas actuó sin levantar sospechas. Usó un nombre que ya no le pertenecía. Compró, no pagó y vendió después. La Policía Nacional ha detenido en Palma a un varón de origen español acusado de estafar a su exempresa y a varios comercios mediante un sistema tan simple como eficaz.
Los hechos se remontan a finales del pasado mes de septiembre, cuando el hombre puso fin a su relación laboral con la empresa afectada. Lejos de cortar del todo, aprovechó el vínculo previo. Ya en las primeras semanas de octubre comenzó a realizar compras de herramientas en distintos establecimientos de la capital balear. También adquirió cobre. Siempre bajo el mismo patrón.
El presunto autor efectuaba las compras en nombre de su antigua empresa. No abonaba el importe. Dejaba la mercancía a deber a la corporación. Una maniobra repetida una y otra vez, sin levantar alertas inmediatas, mientras los productos cambiaban de manos.
Según la investigación, el hombre revendía posteriormente las herramientas y el material adquirido de forma ilícita para obtener un beneficio económico directo. Una cadena de compras ficticias, deudas ajenas y ventas reales.
El Grupo de Robos y Patrimonio Histórico de la Policía Nacional asumió el caso tras conocer los hechos. Las pesquisas permitieron incautar varias herramientas y material de la misma índole. El análisis confirmó el alcance del fraude: un total de 24 compras realizadas y una deuda acumulada superior a los 5.500 euros para la exempresa.
Una vez identificado y localizado el presunto autor, los agentes comunicaron los hechos a las sociedades implicadas y procedieron a su detención. Se le atribuye un delito de estafa tanto contra su antigua empresa como contra los establecimientos que vendieron los productos.











