Policía Local de Palma y Guardia Civil desmantelan un vertedero ilegal de casi 1.000 m³ de residuos.
Una operación coordinada entre la Policía Local de Palma y la Guardia Civil, con el apoyo de EMAYA, ha logrado desarticular uno de los mayores puntos de vertido ilegal detectados en los últimos años en la isla. El escenario: una finca rústica de Son Reus que albergaba toneladas de escombros, materiales tóxicos y hasta animales abandonados.

La investigación arrancó a principios de año. El Grupo de Investigación y Seguimiento de Denuncias (GISD), en colaboración con el SEPRONA, centró sus pesquisas en una parcela sospechosa de albergar actividad ilícita continuada relacionada con la gestión de residuos.
El pasado 30 de julio, tras meses de seguimiento, se ejecutó un dispositivo de entrada e inspección. Participaron unidades especializadas de ambos cuerpos —incluyendo UDROP, UII, UVMA-PV y GISD— además de técnicos de Inspección Medioambiental de EMAYA.

El hallazgo fue impactante:
- Una acumulación de residuos de unos 800 m², con montañas de hasta 3 metros de altura.
- Más de 1.000 metros cúbicos de materiales como escombros, uralita (fibrocemento), arena de sílice, vehículos y embarcaciones.
- Tres ponis sin identificar, en condiciones aún por esclarecer.
La unidad de drones de la Policía Local (UDROP) captó imágenes aéreas que fueron clave para documentar la magnitud del vertido y avanzar en las diligencias judiciales.
Como resultado, se ha identificado a los presuntos responsables, quienes ahora enfrentan denuncias por vulnerar la Ley 8/2019 de residuos y suelos contaminados de las Illes Balears.
Este operativo evidencia una vez más el compromiso firme de las fuerzas de seguridad y las autoridades locales con la protección del medio ambiente y la salud pública.











