La Policía Local de Palma le acusa de un presunto delito de hurto. Llevaba el teléfono escondido dentro de una bolsa de patatas fritas.
Agentes de la Policía Local de Palma adscritos al Equipo Comunitario de Proximidad (ECOP) detuvieron a un ciudadano argelino de 24 años como presunto autor de un delito de hurto y otro de apropiación indebida. La intervención tuvo lugar la tarde del 31 de agosto en la barriada de Son Gotleu.
La patrulla dio el alto al conductor de un patinete eléctrico en el que viajaban dos personas sin casco ni chaleco reflectante. Durante la identificación, el conductor mostró una actitud muy nerviosa e intentó esconder una riñonera. A petición de los agentes, acabó mostrando su interior, donde encontraron un teléfono móvil de alta gama escondido dentro de una bolsa de patatas fritas vacía.
El hombre solo pudo desbloquear otro terminal que llevaba, pero no el que se hallaba oculto. Al inspeccionar este último, los agentes comprobaron que estaba configurado en alemán y contactaron con su legítimo propietario a través de los contactos de emergencia. La víctima resultó ser un turista que ya había regresado a su país y que había denunciado la sustracción del móvil en la Playa de Palma esa misma madrugada.
Además, durante el registro se le intervino una tarjeta ciudadana que no era suya. El hombre fue detenido como presunto autor de los delitos de hurto y apropiación indebida. El patinete eléctrico también fue retirado de forma preventiva hasta que se acredite su propiedad.
La Sala de Atestados instruyó el atestado y, posteriormente, traspasó al detenido a la Policía Nacional.











