Detenido por la Policía Local por un presunto delito de allanamiento de morada.
El escenario fue calle Jordi Andreu Alcover en Palma. Sobre las 05:45 horas del pasado día 12 de mayo, la Policía Local recibió varias llamadas de vecinos que alertaban de gritos de auxilio provenientes de un domicilio.
Una patrulla de la Unidad de Seguridad Integral (USEI) acudió de manera urgente y encontró en el rellano a una familia visiblemente alterada.
La mujer narró que cuando se disponía a salir de la vivienda fue empujada por un individuo desconocido que accedió al interior. Ante los gritos, su marido y su hijo acudieron para ayudarla e intentaron que el hombre abandonara el domicilio, a lo que este se negó e incluso accedió a una de las habitaciones. Finalmente, lograron expulsarlo del domicilio.
El autor de los hechos declaró haber residido allí con anterioridad y que su intención era recuperar algunas pertenencias ya que, según él, tenía derecho a ello. Las víctimas confirmaron no conocer al individuo, si bien creían que se trataba de un antiguo inquilino desahuciado por orden judicial.
Ante estos hechos, los agentes arrestaron al autor, un ciudadano rumano de 39 años, por un presunto delito de allanamiento de morada.
Las diligencias practicadas por la Sala de Atestados, junto al detenido, se traspasaron a la Policía Nacional.