Señalan que los populares tienen una estrategia clara: «aparentar gestión y no molestar a los que se benefician de la saturación».
Més señala que el Ayuntamiento de Palma, gobernado por el Partido Popular, ha rechazado en el último pleno municipal las propuestas presentadas por su formación para poner freno a la saturación turística que afecta a la ciudad.
Un año después de prometer medidas contra la masificación —como limitar la llegada de cruceros, regular los coches de alquiler o prohibir las ‘party boats’—, el gobierno municipal no ha aplicado ninguna de estas iniciativas. Según denuncia la oposición, el equipo del alcalde Jaime Martínez ha optado por no actuar, pese a que los datos apuntan a que la temporada de este verano volverá a batir récords de visitantes.

“La votación de hoy demuestra que el PP no tiene ninguna intención real de frenar la masificación, porque gobierna para quienes se enriquecen a costa de la ciudad,” ha criticado Miquel Àngel Contreras, regidor de MÉS per Palma. “El alcalde Martínez pasará a la historia como el alcalde que consolidó la saturación de Palma,” ha añadido.
Más turistas, más presión y menos soluciones
La ciudad se prepara para un nuevo verano con más cruceros, más vehículos de alquiler, más terrazas y más ruido. Una situación que, según los críticos, favorece el negocio turístico mientras expulsa a los residentes, multiplica la precariedad y tensiona los servicios públicos.
A pesar del colapso en vivienda y transporte, el equipo de gobierno continúa otorgando licencias a nuevos hoteles, ampliando las partidas de promoción turística y rechazando medidas que pongan límites al modelo actual.
“La estrategia del PP es clara: aparentar gestión mientras gana tiempo para no molestar a quienes obtienen beneficios de esta situación. Si no recuperamos Palma como ciudad para vivir, la habremos perdido para siempre. Y la responsabilidad será del alcalde y de su partido,” concluyó Contreras.











