El internacional por Cabo Verde cierra así su trayectoria en el club.
El Fibwi Mallorca Bàsquet Palma ha hecho oficial la salida de Patrick Spencer tras llegar a un acuerdo para la rescisión de su contrato. El internacional por Cabo Verde cierra así su trayectoria en el club, un ciclo breve pero clave en uno de los años más simbólicos para la entidad mallorquina.
La noticia sacude a la afición porque Spencer no era un jugador cualquiera: formó parte del equipo que logró el ansiado ascenso y el regreso a la Primera FEB. Su impacto fue discreto en el ruido mediático, pero decisivo en el parqué.
Un año de impacto silencioso
Spencer aterrizó en Palma la pasada campaña en Segunda FEB. En total disputó 33 partidos entre Copa de España, Liga Regular y eliminatorias de ascenso. Su aportación, aunque lejos de los focos, fue constante:
7,7 puntos, 4,5 rebotes y 0,5 asistencias en 17,44 minutos de media.
Un jugador fiable, sólido, de los que sostienen al equipo en silencio mientras otros acaparan portadas. Ese tipo de perfiles que solo se echan en falta cuando ya no están.
Una temporada más corta, pero igual de comprometida
En el presente curso, Spencer ha participado en cinco encuentros, promediando 11,06 minutos por partido. Su rol había cambiado, pero no su disciplina. No era un jugador con grandes cifras esta temporada, pero sí de los que mantienen el equilibrio en la rotación interior.
El anuncio de hoy confirma que ambas partes han decidido separar sus caminos de forma amistosa. El club ha agradecido públicamente su trabajo, su compromiso y su papel en el ascenso. Una despedida elegante para un jugador que siempre cumplió.











