Pep Suari enseña desde Pòrtol “el placer de pintar” a alumnos de entre 6 y 80 años

Desde su estudio taller de Pòrtol, vecino del edificio del cine, Pep Suari enseña dibujo y pintura a 40 personas con edades comprendidas entre los 6 y los 80 años, algunos de los cuales vienen desde otros municipios de Mallorca para aprender las técnicas de la pintura de la mano de este reconocido artista catalán.

Los niños y niñas de entre seis y doce años acuden las tardes de los viernes, en dos turnos, de 16.00 a 17.30 horas o de 18.00 a 19.30hs. Con ellos, Pep Suari trabaja el dibujo, la pintura y también las manualidades. “La idea –explica el maestro- es que sean clases variadas y entretenidas, que se diviertan mientras van aprendiendo. Y que vayan subiendo su nivel con conocimientos, pero sobre todo con la práctica”.

Cuando cumplen los doce, los alumnos de Suari suben a la primera planta de su taller, y se juntan con el resto de alumnos, con los adultos. Para ellos, Suari dedica las tardes de los martes y jueves, en turnos de 17.00 a 20.00 horas, y las mañanas de los sábados de 10.00 a 12.00 hs o de 12.00 a 14.00 horas. Turnos estos últimos que en estos momentos están completos.

Las clases transcurren en un ambiente relajado en el que Pep Suari va dotando de nuevas técnicas a sus alumnos de forma personalizada. “Intento que haya disciplina –explica- y vamos trabajando el dibujo, el color, distintas técnicas y materiales para que puedan ser autónomos. Porque a medida que vas aprendiendo las técnicas, vas adquiriendo más posibilidades para expresar”.

El maestro explica que “valoro más el momento… qué es lo que pasa cuando la gente pinta, cómo se encuentran aquí y ahora”. Y reconoce también que “a veces no es fácil adaptarse a las necesidades concretas del alumno”.

Pep Suari (Barcelona-1957) reside en Mallorca desde hace 30 años. Cursó sus estudios de pintura de la mano de Pau Mañé, J. Martínez Lozano y Joaquín Torrents Lladó.

Pinta un poco de todo, “empecé con un expresionismo figurativo con incursiones en abstracto –explica- y he ido evolucionado hacia un figurativismo de toques mediterráneos, expresionistas… con colores luminosos y puros”.

Suari confiesa sentirse muy a gusto con ambas facetas “me llenan ambas áreas, la faceta de pintor y la de maestro. Me encanta ver a la gente con ilusión de venir a las clases de pintura y ver como van mejorando. Es muy satisfactorio ver cómo van evolucionando los adultos y los niños”, expresa.

Este reconocido artista, laureado dentro y fuera de nuestras fronteras, con un buen número de exposiciones a sus espaldas por todo Mallorca, la península y el extranjero, porque sus obras han llegado incluso a Tokio y a Texas, reconoce que el momento es muy malo para los artistas ya que es precisamente el arte una de las primeras cosas que se dejan de consumir y de las que más tardan en recuperarse.

“La parte comercial de la pintura es difícil y por eso intento buscar el placer de pintar –explica- y desde mis clases, intento transmitir ciertos valores a mis alumnos y que la base no sea una expectativa comercial”.